Los niños del colegio se metían con Luz porque su pelo parecía una col.
Los profesores no regañaban a estos niños. Luz lloraba y solo pensaba en su pelo de col.
Encontró a una chica que le explicó que su vestido rojo lo formaban los corazones de aquellos que se lo habían dado para no sentir dolor y si ella le entregaba el suyo, no sentiría dolor, pero tampoco el amor. Luz pensó que eso sería aún más doloroso, por eso, conservaría su corazón e iría a un colegio en el que no se riesen de su pelo de col.
